El legado de Qali Warma: productos insalubres en la mesa de los estudiantes

Entre 2020 y septiembre de 2024, Qali Warma acumuló 645 denuncias por presencia de gusanos, gasa, óxido y otros contaminantes en sus raciones escolares. A pesar de los históricos sancionamientos, proveedores con antecedentes de insalubridad mantuvieron contratos sin que se aplicaran medidas de control ni transparencia efectivas.

Freddy Panduro acaba de subir un vídeo en Facebook. En imagen, se muestra un pedazo de gasa dentro de una conserva de pescado que entrega el extinto programa nacional de alimentación Qali Warma —ahora Wasi Mikuna— a los estudiantes del Perú para evitar su desnutrición. Se trata de la conserva Jeyko Mar, fabricada por la empresa Inversiones Generales del Mar S.A.C, sancionada en 2022 por deplorables condiciones en sus instalaciones.

Una vez monitoreado el vídeo, funcionarios de Qali Warma analizarán el cuerpo extraño en el producto, concluyendo que no es apto para el consumo humano. Esta es la undécima denuncia contra Inversiones Generales del Mar —de un total de 13 registradas— antes de que el programa pase a llamarse Wasi Mikuna.

Así como este caso, «La Viñeta» detectó que se han registrado 645 denuncias entre 2020 y septiembre del 2024 —cerca de una cada tres días—, poco antes de que explotara el caso de Frigoinca, que involucró el uso de carne de caballo en las conservas que fabricaba y entregaba a los estudiantes.

En las 645 denuncias se registraron presencia de gusanos, larvas, moscas, pelos, óxido, aperturas en las latas, sabores u olores extraños. Sin embargo, cerca de la mitad de estas, al momento de ser evaluadas para su separación, pasaron el control de calidad. Otro pequeño grupo de productos no tuvo respuesta concluyente, porque se extraviaron o no se encontraron para su evaluación.

Poco antes de que se hiciera público el caso de Frigoinca y las sospechas sobre el uso de carne de caballo en sus productos, Qali Warma ya registraba denuncias contra esta marca y otras más, provenientes de las escuelas y Unidades Territoriales (UT), encargadas de monitorear y supervisar la calidad de los productos entregados a las instituciones educativas.

Durante esta investigación, se detectó una cantidad significativa de reportes sobre ciertos productos, entre ellos:

Conservas Don Simón de Frigoinca

Esta marca acumuló 23 denuncias por problemas como corrosión en las latas, presencia de cabellos, fragmentos de plástico afilado, manchas negras e incluso presuntas intoxicaciones.

A pesar de su historial negativo, la marca mantuvo su participación en el programa hasta octubre de 2024, cuando su distribución fue suspendida tras quedar expuesta a nivel nacional sobre los problemas de salubridad, corrupción y falta de transparencia.

Conservas Panafoods de Pacific Natural Foods

Entre 2021 y 2023, Panafoods registró 26 denuncias por irregularidades que incluían la presencia de moscas, óxido, manchas negras y un sabor picante inusual. Estos hallazgos demostraron que la calidad de sus productos estaba muy por debajo de los estándares requeridos para la alimentación de niños y adolescentes. Sin embargo, la única medida adoptada fue la suspensión de algunos lotes analizados.

Leche Estrella del Sur de Gloria

Durante el 2024 se registraron 29 denuncias, relacionadas principalmente por la presencia de grumos, lo que comprometía la textura, sabor y la seguridad del producto. Se documentaron casos en los que el consumo de este producto afectó la salud de las personas. 

Entre marzo y mayo de ese mismo año, los reportes de insalubridad alcanzaron el pico más alto, y varios lotes fueron paralizados: la Dirección General de Salud Ambiental e Inocuidad Alimentaria (DIGESA) —una de las entidades que se encarga de fiscalizar las denuncias— recomendó evitar su consumo.

Conservas Kathymar de Inversiones Kathymar

Kathymar acumuló un total de 34 reportes, de los cuales 13 corresponden a denuncias realizadas al 2024. Las quejas van desde la presencia de óxido y sabor rancio hasta posibles intoxicaciones en las personas que lo consumieron.

Leche Bonlé de Gloria

Este producto enfrentó la mayor cantidad de denuncias, con 38 reportes acumulados entre 2020 y 2023. La paralización de sus productos se debió a problemas de óxido, grumos, olor rancio y manchas negras.

Otras Marcas

Otras marcas como las conservas Tormenta del Mar de Group Corporation Reye’s, Casali de Pesquera Karsol, Gambrinus de Productos Gambrinus Werner Riepl Wahl – Conseral, y Hatun Pez del Consorcio Pesquero El Ferrol, registraron entre 15 y 20 denuncias cada una durante esos 4 años.

Uno de los mayores cuestionamientos detectados en esta investigación es la continuidad de empresas con antecedentes que atentaron contra la salud. A pesar de las reiteradas denuncias, Qali Warma ha mantenido en circulación productos con historial de insalubridad.

La ausencia de sanciones severas ha facilitado que las empresas proveedoras o distribuidoras puedan postular a concursos públicos en otras entidades, asegurando así negocios lucrativos.

Esta deficiencia se evidenció en el último año de Qali Warma: en 2024 se registró la mayor cantidad de denuncias hacia los productos que repartía, alcanzando un total de 288 reportes en contra de la inocuidad alimentaria.

A partir de una investigación de Salud con Lupa, se detectó que dos empresas proveedoras, encargadas de repartir productos a las ollas comunes para la Municipalidad de Lima en 2023, ya contaban con antecedentes en el programa Qali Warma.

Conseral participó en Qali Warma sin contar con la preparación adecuada: meses antes de ser contratada, cambió su razón al rubro de alimentos. Entre noviembre de 2023 y mayo de 2024, los productos que distribuyeron acumularon denuncias por la presencia de materia extraña y manchas negras en productos cárnicos. Cerca de esas fechas, obtuvo contratos con la Municipalidad de Lima para proveer productos como donación a las ollas comunes.

Por otro lado, Inversiones Generales del Mar, que también fue contratada por la Municipalidad de Lima, fue sancionada en 2022 por deplorables condiciones higiénicas en sus instalaciones —donde se documentaron heces, cucarachas, moscas y gusanos—; sin embargo, continuó participando en el programa nacional.

Entre junio y julio de 2023, en Qali Warma, se denunciaron olores a descomposición y la presencia de gasa en algunos lotes; este último hecho fue informado a través de un video en Facebook —actualmente eliminada—, lo que llevó a la suspensión parcial de la distribución.

Wasi Mikuna, la nueva denominación de Qali Warma, oculta información pública y muestra reticencia a responder sobre el tema que le llevó a cortar cabezas en lo que se perfilaba como uno de los ministerios más sólidos del gobierno de Dina Boluarte: el caso de Frigoinca.

Recientemente se solicitó información actualizada —en lo que va de este año— sobre las denuncias relacionadas con esta empresa, pero la entidad argumentó que dichos datos eran confidenciales. 

No obstante, poco antes de que se expusiera la producción de carne de caballo en los productos y los constantes sobornos a funcionarios para aprobar evaluaciones, se entregaba y divulgaba dicha información vía acceso a la información pública.

Wasi Mikuna intenta callar que las conservas Don Simón, de la empresa Frigoinca, contaban con un historial de 23 denuncias durante los últimos 4 años de vida de Qali Warma —ya explicadas anteriormente—. Muchas de ellas vinculadas a lotes que, a pesar de haber sido evaluados, fueron liberados. 

Estas denuncias incluían la presencia de materias extrañas, probablemente relacionadas con un presunto mal tratamiento de la carne de caballo utilizada en su procesamiento.

A pesar de las múltiples denuncias de primera mano —de personas que tuvieron contacto o consumieron los productos— las empresas fabricantes y proveedoras de productos contaminados o adulterados continuaron participando en la entrega del programa.

Empresas proveedoras seleccionadas por el programa no contaban con la preparación adecuada para la producción de alimentos ni tampoco con locales en condiciones de salubridad e higiene. 

Los productos que entrega Wasi Mikuna presentan los mismos patrones de insalubridad de Qali Warma, sin importar las promesas de reforma y las modificaciones en los mecanismos de control de los alimentos: no pueden contener una larga cadena de insalubridad sistemática, sobornos y falta de transparencia.